La llegada del verano trae consigo un espectáculo natural que transforma los paisajes de la comarca de La Bureba, en Burgos. Entre julio y agosto, los campos de girasoles florecen, tiñendo de dorado el entorno de Briviesca. Este fenómeno natural no solo es una oportunidad para disfrutar de la belleza del paisaje, sino también para explorar un rico patrimonio cultural. Azorín, famoso escritor español, se refirió a este lugar como «El corazón de Burgos». ¿Quieres saber por qué? Acompáñanos en este recorrido por la floración de los girasoles y el patrimonio de Briviesca.
Girasoles con arte: una ruta que combina patrimonio y naturaleza
La iniciativa «Girasoles con arte» en Briviesca ofrece una experiencia única que fusiona la belleza de los campos de girasoles con el rico patrimonio cultural de la localidad. Esta actividad, de acceso libre, invita a los visitantes a disfrutar de un recorrido que combina senderismo, turismo rural y naturaleza.
Un recorrido sin prisas
El recorrido comienza en la Plaza Mayor de Briviesca y se extiende a lo largo de 3 kilómetros, aunque los visitantes pueden alargarlo a su antojo. No hay un tiempo marcado para la ruta, lo que permite a los viajeros disfrutar de cada rincón, detenerse en los monumentos y sentir la energía de los vastos prados de girasoles.
Patrimonio cultural: de la iglesia catedral a ‘El Escorial de los Retablos’
Iglesia de San Martín
La primera parada en este recorrido es la Iglesia de San Martín, construida en el siglo XVI. Su fachada plateresca y su mezcla de estilos gótico tardío, renacentista y barroco la convierten en un punto de interés. En su interior, destaca un retablo del siglo XVII que merece una visita.
Colegiata de Santa María
La siguiente parada es la impresionante Colegiata de Santa María, una de las más antiguas de España. Declarada Monumento Histórico Artístico Nacional en 1983, su construcción se inició en el siglo XIV, aunque su fachada neoclásica data del siglo XVIII. Las dos torres con cúpulas gallonadas son un símbolo del edificio, y su interior alberga la Capilla de Santa Casilda y la espectacular Capilla del Sagrario, decorada con pintura al fresco.
Iglesia de Santa Clara
La última parada del recorrido es la Iglesia de Santa Clara, parte de un conjunto arquitectónico mandado construir en el siglo XVI por Doña Mencía de Velasco. Este monumento, declarado Monumento Nacional en 1931, incluye un monasterio, una casa solariega y un hospital. Su retablo, conocido como la Joya de Briviesca, es una obra maestra del Renacimiento y se ha ganado el apodo de ‘El Escorial de los Retablos’ por su originalidad y calidad.
Briviesca: el corazón de Burgos
Briviesca, apodada por Azorín como «El corazón de Burgos», es un lugar donde la historia y la naturaleza se entrelazan. Situada en un corredor natural que va desde el Alto de la Brújula hasta el Desfiladero de Pancorbo, esta localidad es un punto de partida ideal para explorar rutas como las Rutas Románicas o la Ruta de La Bureba, que conducen a lugares mágicos como Poza de la Sal, Oña o Frías.
Burgos: origen y destino turístico
La provincia de Burgos es un lugar lleno de historia y cultura. Considerada el origen de la lengua castellana y cuna de leyendas, es un cruce de caminos que ha dejado un legado arquitectónico, artístico y etnográfico. Para aquellos que buscan un viaje lleno de sensaciones, Burgos ofrece una combinación perfecta de patrimonio, naturaleza, gastronomía e historia.
Para más información sobre la oferta turística de Briviesca y la comarca de La Bureba, puedes contactar con la Oficina de Turismo de Briviesca al teléfono 947 593 939 o visitar www.turismodeburgos.org.
¡No te pierdas la oportunidad de sumergirte en el mar dorado de girasoles y descubrir todo lo que Briviesca tiene para ofrecer!
